En nuestra oscuridad…, un diminuto microorganismo ha cambiado nuestras vidas.
Se abren infinitud de preguntas. Nuestros relojes parecen dilatar el paso de las horas… se nos invita a la resistencia, a la disciplina, al sacrificio, a la solidaridad, a la creatividad…, pero el paso del tiempo se vuelve infinitamente lento.
La incertidumbre y el sufrimiento es una densa tiniebla sobre nuestras vidas.
Como el ciego del camino nos ponemos ante ti, Señor. Danos tu LUZ